* La propuesta plantea reconocer como violencia económica prácticas como impedir que las mujeres trabajen o controlar sus ingresos
* Una de sus expresiones más comunes es la
imposición de trabajar en un negocio familiar sin recibir ninguna remuneración
Libertad, Mexicali, B. C., Julio 28 del 2025.-Con el objetivo de fortalecer el marco
jurídico que protege los derechos de las mujeres en Baja California, el
diputado Ramón Vázquez Valadez, presentó ante el Pleno una iniciativa de
reforma al artículo 6 de la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de
Violencia, a fin de reforzar y ampliar la definición de violencia económica,
incorporando modalidades que hasta ahora no han sido visibilizadas ni
sancionadas de forma clara.
Para motivar su pretensión, el legislador de
Morena enfatizó que la violencia económica y patrimonial es una de las formas
más frecuentes y menos denunciadas de agresión hacia las mujeres. “Esta
problemática afecta de manera profunda la autonomía y el desarrollo personal de
quienes la padecen”, señaló.
Dicha violencia puede ejercerse tanto en el
ámbito familiar como en el espacio laboral, donde se reproduce a través de
prácticas como la exclusión de mujeres de puestos de alta dirección, la
desigualdad salarial o la falta de reconocimiento del trabajo femenino en
negocios familiares.
"Una de las manifestaciones más comunes
ocurre cuando se obliga a las mujeres a trabajar sin recibir remuneración, bajo
el argumento de que su labor representa un 'apoyo natural' o una 'obligación
moral'. Esta práctica vulnera su derecho a percibir ingresos propios, construir
un historial laboral y acceder a prestaciones sociales o a una pensión",
explicó Ramón Vázquez.
Abundó que, impedirles trabajar mediante
control, intimidación o manipulación emocional, también constituye una forma
directa de violencia económica. Al negarles esta posibilidad, se priva a las
mujeres de herramientas esenciales para romper ciclos de dependencia y
vulnerabilidad.
La violencia económica repercute, de manera
directa, en la libertad de las mujeres violentadas, pues se ven limitadas en el
ingreso y egreso de los recursos económicos, aun cuando sean ellas mismas
quienes los generen. En muchos casos el hombre se auto posiciona como
administrador del hogar, colocándolas en una situación de desventaja sin su
consentimiento.
La propuesta también subraya que la violencia
contra las mujeres es una de las violaciones más generalizadas de los derechos
humanos, con graves consecuencias físicas, psicológicas y económicas, afectando
su participación plena y en igualdad dentro de la sociedad.
Comentarios
Publicar un comentario